Los 5 pasos clave de una buena rutina facial
- Meritxell Llorca
- 25 oct 2022
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 28 sept 2023
Para tener una buena rutina facial, no hace falta que uses 15 productos, 3 accesorios de masaje o de belleza y mil y otras "viralidades" más.
El mejor consejo que puedo dar es: visita a un profesional. Porque podemos analizar tu piel y evaluar los tratamientos y productos que más se adapten a tí. Es algo que se repite mil veces, pero todavía seguimos viendo barbaridades que se comenten.
Pero no tengas problema, porque aunque cada tipo de piel tiene necesidades distintas -y el producto que elijas debe ser adecuado-, puedes empezar con una rutina de 5 pasos clave, que no te fallarán.
Paso 1: Limpiador
Usa un limpiador suave. Debe ser respetuoso y que no agreda tu piel, pero sea capaz de limpiar en profundidad. Realiza una doble limpieza por la noche. Durante el día la piel se contamina más que por la noche, es importante ir a dormir con la piel bien limpia.
Paso 2: Tónico
Regula el ph de tu piel despues de la limpieza. La maysoría de productos de limpieza, y el agua, desestabilizan el ph cutáneo, por lo que debemos re-equilibrarlo para que la piel recuepre su estado, además, ayudaremos a una mejor absorción de los productos que apliquemos a continuación.

Paso 3: Sérums
Los sérums penetran más profundamente en las capas de la piel que otros productos para el cuidado de la piel. Al añadir un sérum a tu rutina, puedes administrar potentes ingredientes directamente a tu piel para tratar diversos problemas. Aplícalo a presiones, no lo masajees. Pon tu manos alrededor de tu cara y presiona unos segundos, luego con una mano en la frente y otra en mentón, presionas de nuevo.
Adapta este producto a las necesidades de tu piel, y recuerda que está en constante cambio, pero puedes combinar tratamientos para alcanzar diferentes objetivos.
Si tienes una piel joven y que no requiera de ninguna necesidad concreta, siempre puedes aplicar un serum de ácido hialuronico, la hidratación siempre es un plus a largo plazo.
Paso 4: Hidratante
El principal objetivo de una crema hidratante es humectar la piel. Debes aplicarla por la mañana y por la noche. Si tienes la piel grasa o propensa al acné, debes usar una crema hidratante más ligera por la noche para evitar brotes. Si tienes la piel seca, usa una crema más espesa, más nutritiva.
Paso 5: Protector Solar
El paso más importante en cualquier rutina de cuidado de la piel es el protector solar. Podrás gastar todo el dinero del mundo en cosmética, tratamientos infiltraciones…. Pero si no proteges tu piel del sol, nada de lo que hagas tendrá mucho sentido sobretodo a largo plazo, cuando los efectos del sol empiezan a promover un envejecimiento prematuro, y sus efectos empiezan a evidenciarse.
Lo que no incluyes en tu rutina facial, y deberías

Tu rutina facial no debería terminar en el rostro. Muchas veces nos olvidamos de cuidar el cuello y el escote, dos zonas igual de delicadas que la piel de la cara y con la que también comparten el mismo proceso de envejecimiento.
Si quieres reducir los efectos visibles que se producen con el paso de los años en cuello y escote, debes aplicar en estas dos zonas, todo producto que apliques en tu rostro.

Y otra de las zonas que caen en el olvido, sin darnos cuenta que revelan más de nosotros de lo que querríamos, son las manos. Además, sufren los efectos del sol (¿quién se pone crema en el dorso de las manos...?), el peso de objetos, productos de limpieza... y pocas veces les devolvemos el mimo que merecen.
En el dorso de nuestras manos también suelen salir manchas, aparece la flacidez y empiezan a mostrar las signos de cada batalla. Así que no las olvides en tu rutina facial: aprovecha ese restito que siempre queda en la palma de las manos para ponerla en el dorso de tus manos.
Y recuerda que comprar un producto que no es adecuado para ti, te hace perder el tiempo, el dinero y el foco en tus objetivos.